Bélgica permite a los padres demandar por «nacimiento injusto» cuando el hijo nace con discapacidad.

El seleccionador nacional con su hijo discapacitado.

Lamento reconocer que muchas entradas de este blog están motivadas por golpes de indignación. Pero es que cuando uno lee lo que lee, estas noticias como la que os transcribo. No puede uno hacer menos que revolverse y reaccionar. Y realmente lo peor de todo es que estas noticias no abren telediarios, pasan desapercibidas. ¿Qué le pasa a esta sociedad? Estamos inoculados por una potente droga, anestesiados. ¿No somos capaces de darnos cuenta de tamaña enormidad?. Me quedo con esta frase copiada literalmente “El tribunal comentó que el aborto es en el mejor interés del niño cuyos padres lo habrían matado, señalando que a partir de la legalización del aborto “el legislador debe haber tenido la intención de ayudar a evitar dar a luz a niños con graves anormalidades, al haber considerado no sólo los intereses de la madre, sino también el del mismo niño por nacer”.

¡¡¡ El aborto es en el mejor interés del niño…!!! Es como decir que un reo va a ser llevado a la silla eléctrica porque será lo mejor para él. Si no fuera trágico sería hasta humorístico… van a abortar al niño “por su bien”, Dios nos libre de la compasión de estos legisladores, se permite matar a alguien para que no sufra. ¿No es la peor de las “anormalidades” un tribunal que dice cosas como ésta?. Pero ¿qué es la “normalidad”? El problema viene sobre QUIEN debe ser y que criterios tiene aquel que dictamine si una vida merece la pena o no. Para echarse a temblar.

Que terrible insulto a todos los discapacitados graves, a los que les estaremos diciendo que su vida no merece sino tirarse a la basura, que no es digna de ser vivida, que sobran. Que sus ganas de vivir y su esperanza son absurdas…

Estamos subiendo los primeros escalones de un nazismo frio, de una eugenesia “consensuada”… de aquí llegar al “Mundo Feliz” de Huxley solo es cuestión de tiempo.

Recemos para que la gente se dé cuenta de una vez de que este camino nos conduce a la deshumanización y al horror.

Bélgica permite a los padres demandar por «nacimiento injusto» cuando el hijo nace con discapacidad

El Tribunal de Apelación de Bruselas ha dictaminado que los padres pueden demandar a los médicos que no diagnosticaron “discapacidades graves” de los niños antes de nacer, dando por supuesto que si los padres hubiesen sabido eso ellos habrían hecho matar al hijo discapacitado mediante un aborto.

La sentencia del 21 de septiembre dijo que “ciertamente, el diagnóstico equivocado no causó la discapacidad del niño, que existía antes del error y que no podía ser remediada”. Pero el tribunal dijo que “el daño [que] debe ser compensado no es la discapacidad misma, sino el hecho de haber nacido con esas discapacidades.

El tribunal comentó que el aborto es en el mejor interés del niño cuyos padres lo habrían matado, señalando que a partir de la legalización del aborto “el legislador debe haber tenido la intención de ayudar a evitar dar a luz a niños con graves anormalidades, al haber considerado no sólo los intereses de la madre, sino también el del mismo niño por nacer”.

En los últimos años, el examen prenatal y el aborto legal se han combinado en todo el mundo para crear la nueva acción legal de demandas por “nacimiento injusto”. En tales casos, los padres demandan a un médico o al hospital por no advertirles que un niño será discapacitado o por no recomendar el aborto. Los daños y perjuicios se buscan para cubrir los gastos médicos para el mantenimiento del niño y para la asesoría psicológica de los padres.

En los pleitos de “vida injusta”, por lo general el niño o su representante demanda a su médico para que le brinde apoyo a lo largo de toda la vida.

El crecimiento de este tipo de litigios ha sido posterior al crecimiento de la industria del aborto y al incremento del nivel de comodidad de tribunales y legislaturas con el aborto legal, así como a la creciente popularidad de los argumentos de los grupos de presión para la eutanasia, que sostienen que la muerte es preferible a la vida con discapacidad.

En 1982, un tribunal inglés rechazó un caso de vida injusta, basándose en que aceptar esa definición “significaría respecto a la vida de un niño discapacitado que no sólo es menos valiosa que la vida de un niño normal, sino de tan poco valor que no valdría la pena conservar”.

Sin embargo, a pesar de aún ser considerada legalmente cuestionable por muchos expertos, la práctica de litigar por una vida injusta y el nacimiento injusto está ganando terreno en todo el mundo, incluyendo Canadá, Estados Unidos, Francia, Polonia, Gran Bretaña y Australia. En Bélgica, la situación jurídica es aún más avanzada, con la eutanasia indiscutida al haber sido legalizada en el 2002.

Sin embargo, algunas jurisdicciones están rechazando la idea que los niños con discapacidad estarían mejor muertos y que por eso tienen “derecho” a ser asesinados antes de nacer. En Italia, en el 2006, el Tribunal de Casación dictaminó que “no existe algo así como un derecho a no nacer”. La sentencia dictaminó que “el llamado aborto ‘eugenésico’ no es admisible, a menos que las deformaciones del feto pongan en peligro la salud de la madre”.

En el 2002, el gobierno francés rechazó la decisión de su propio Tribunal Supremo, aprobando una ley que decía que si no se detecta una discapacidad en el útero eso puede dar lugar a reclamos por daños y perjuicios, pero sólo si es el resultado de un “error flagrante” por parte de un médico. En estos casos, los daños y perjuicios sólo pueden ser reconocidos para el niño.

En abril de este año, el Estado de Oklahoma, en Estados Unidos, aprobó dos proyectos de ley pro-vida, uno de los cuales prohíbe las demandas por vida injusta y por nacimiento injusto.

Wesley Smith, el estadounidense abogado y experto en bioética, escribió esta semana sobre la decisión del Tribunal de Apelaciones de Bélgica: “Esto es pensar que una vida no es digna de vida, una discriminación injusta de ‘comensales inútiles’ contra personas con discapacidades del tipo más pronunciado”.

“Esto genera un desprecio mortal hacia nuestros hermanos y hermanas con discapacidades. Y la parte que da miedo es que los belgas se ven a sí mismos como la cima de la tolerancia moderna, porque ellos expresan su intolerancia con palabras que destilan compa-aaaaa-ssssssión! Es algo vil y repugnante”.

Noticia extraída de http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=12657

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Daniel Estulin, experto en el Club Bilderberg.

Aquí os paso un artículo de PERIODISTADIGITAL.COM, en el habitual seguimiento de este blog a las noticias que van apareciendo sobre el Club Bilderberg. Si queréis oir una entrevista entera aquí tenéis el enlace: http://www.periodistadigital.com/politica/gobierno/2010/06/28/estulin-daniel-bilderberg-sitges-zapatero-medidas-crisis-union-europea-euro-conspiracion-octopus-deplome-financiero.shtml

Daniel Estulin presenta “Conspiración Octopus”

Daniel Estulin.

 “En Bilderberg se habló de sacrificar países como España, Italia o Grecia para salvar el euro”

A Zapatero le “despacharon como al jefe de una tribu africana”

Miguel Pato, 28 de junio de 2010 a las 18:28

España está en una situación mucho más crítica que Grecia. Su deuda asciende a 250.000 millones de euros.

 

La última reunión del Club Bilderberg se celebró en Sitges. Sabíamos que se debatiría sobre el futuro de la Unión Europea y del euro. Gracias al trabajo de investigación de Daniel Estulin se revela que se trataron asuntos tan delicados como la necesidad de «sacrificar» a algunos países (los llamados Pigs – entre los que está España) para poder salvar la unión monetaria actual.

Estulin en una entrevista con Periodista Digital explica que

«Para salvarse los países más fuertes de la UE (Alemania, Francia, Holanda…) tienen que sacrificar a los más débiles. Por eso se habló de una Europa de dos niveles expulsando de la Unión a los Estados más débiles o mantenerlos fuera hasta que sus economías se recuperen». 

Este periodista de investigación añade que el problema es que en Bilderberg no se llegó a diseñar un plan factible para presentar esta medida a la opinión pública. Lo que tienen muy claro, asegura Estulin, es que es ineludible «porque no hay más dinero para seguir rescatando países».

Estulin, que recientemente ha sido ponente en el Parlamento Europeo, cita a fuentes de alto nivel de este organismo para señalar que

«España está en una situación mucho más crítica que Grecia. Su deuda asciende a 250.000 millones de euros. Es un país que está condenado a abandonar el euro para poder salvarse.»

Sobre la intervención de Zapatero, Daniel Estulin criticó duramente al presidente español porque

«Bilderberg demanda medidas concretas y Zapatero sólo habló de generalidades. Dio un discurso muy parecido al que suele brindar en León o Andalucía ante simpatizantes de su partido. Decepción a los miembros de Bilderberg y le despacharon como al jefe de una tribu africana.»

Para Estulin España es

«Un cadáver que no tiene industria, ni recursos naturales… Su única salida es abandonar el euro, volver a la peseta, al Estado nación. En la reunión de Bilderberg de hace unas semanas quedó demostrado que el sistema actual no funciona.»

CONSPIRACIÓN OCTOPUS

Estulin durante los últimos cuatro año, además de seguir investigando sobre Bilderberg, ha trabajado en Conspiración Octopus (Ediciones B). La historia del grupo que controla el finanzas del mundo por encima del gobiernos más poderosos del planeta. Las historias y los secretos que revela se presentan en forma de novela porque así se lo han aconsejado.

«Conspiración Octopus son tramas mucho más peligrosas que las de mis libros anteriores. Amigos míos del Departamento de Estado de EEUU me aconsejaron que era más segura una novela. Me dijeron que si salían a la luz algunas de las cosas que revela se desplomarían las finanzas del mundo en un solo día.»

EL CLUB BILDERBERG VUELVE A REUNIRSE…

Bernardino León, posible sustituto de Zapatero.

Os paso a continuación un enlace con elsemanaldigital.com en el que se informa de la nueva reunión del famoso grupo Bilderberg, el espeluznante club de los supuestos amos del mundo. Del artículo me quedo con dos cosas; el nombre que está sonando como sustituto de Zapatero: Bernardino León, veremos si al final acierta el vaticinio y la posibilidad de que esta próxima reunión tenga lugar en España, concretamente en Sitges… Continúo siguiendo todas las noticias que llegan a mis antenas sobre Bilderberg y las más significativas las compartiré con vosotros.

http://www.elsemanaldigital.com/articulos.asp?idarticulo=106606

David Rockefeller

Ignorancia y Grosería para la Ciudadanía. NO ERA ESTO…

«No era esto, no era esto…» Esta famosa frase, pronunciada por Ortega y Gasset al ver en lo que se habían convertido las ilusiones puestas en la II República Española, viene al pelo aplicada a lo que estamos llegando en el panorama educativo nacional.

Las ansias de renovación, de libertad, de calidad en la enseñanza que traía la sociedad española con el advenimiento de la democracia han dado como fruto un bódrio hecho de remiendos. Hemos fracasado en el intento de consensuar el modelo de educación que queremos para las nuevas generaciones usando la educación como arma arrojadiza contra el adversario. En consecuencia no se vé la educación como un fin sino como un instrumento que trabaja a favor de la ideología imperante de turno (nacionalismo, progresismo, etc).

Con las nuevas leyes se pretende sobre todo controlar lo que pasa en las aulas de tal modo que se ha convertido al profesor y al maestro en un burócrata que tiene que gastar más tiempo y energía en rellenar formularios que en dar la clase en sí. Con la llegada de Zapatero al poder se ha dado una nueva vuelta de tuerca porque, ya sin disimulo, se está utilizando la educación como herramienta de ingeniería social, expulsando de éste ámbito todo atisbo de libertad. Estamos asistiendo al alumbramiento de una nueva inquisición que expulsa fuera de la escuela cualquier pensamiento que se oponga al progresismo impregnado de «pensamiento débil» y de posmodernidad. Hace muy pocos años hubiera sido impensable imaginar siquiera unas páginas tan abyectas en un libro de texto dirigido a estudiantes menores de edad como las que os muestro a continuación. http://www.periodistadigital.com/ciencia/educacion/2010/03/16/epc-se-mofa-de-la-religion-marxismo-educacion-adoctrinamiento.shtml

A pesar de todo esto, en este pais nunca pasa nada, la capacidad de reacción que debería tener una sociedad mínimamente culta e informada queda neutralizada con una mortal anestesia  inoculada en vena por la tv, formada por una mezcla de fútbol, reality show y prensa rosa. Tristemente vivimos en una sociedad «bladiblub», ¿seremos capaces de reaccionar? ¿despertaremos algún día de nuestra somnolencia? ¿qué tiene que pasar para que digamos de una vez «hasta aquí hemos llegado»?. Ójala llegue pronto ese día.

JULIAN SIMON ECONOMISTA OPTIMISTA

Julian Simon Economista Optimista

Y héte aquí que encuentro casualmente en el blog de Fdez. Barbadillo  a un señor que respalda científicamente lo que yo vengo opinando… que el peligro no viene por el cambio climático, ni la explosión demográfica si no más bien de la falta de libertad para el desarrollo humano. Os paso un pequeño resumen sobre este interesantísimo personaje que abre una ventana para que entre aire fresco en este enrarecido ambiente ecoapocalíptico que nos rodea.

Un homenaje a Julian Simon

por Stephen Moore

Stephen Moore es presidente del Free Enterprise Fund y es Académico Titular de Cato Institute.

A inicios de este año, un grupo de geólogos publicó una teoría asombrosa: el calor del núcleo de La Tierra está constantemente reponiendo los depósitos subterráneos de carbón, gas natural, y petróleo. Aunque lejos de ser probada, la teoría sugiere que lo que conocemos como combustibles «fósiles» podrían de hecho ser renovables y, para todos los propósitos básicos, ilimitados. La implicación: energía barata y fácilmente accesible por siglos y siglos de humanidad.

En algún lugar del cielo, Julian Simon está sonriendo.

Economista, autor, inventor, y amigo de contradecir, Simon—quien muriera antes de tiempo en 1998—fue lo más cercano que hemos estado de alcanzar un recurso humano irremplazable. Uno de esos raros pioneros que Dios pone en nuestro camino, sus ideas estuvieron muy adelantadas a su tiempo como para ganar el galardón de todo icono: ser desestimado durante la mayor parte de su carrera como alguien oscuro y hasta peligroso. Eso sucede a lo largo de la historia: Galileo fue calificado de loco por proclamar que La Tierra era redonda y giraba alrededor del Sol. Julian Simon, en una era de supuestos límites, nos enseñó que La Tierra y su cargamento humano son esencialmente infinitos. «Los recursos son creados por el intelecto del hombre», predicó Simon, «y éste es ilimitado en su capacidad».

Los maltusianos ligaron el crecimiento de la población humana a, como al misántropo multimillonario Ted Turner le gusta ponerlo, «una plaga de langostas». Simon vio algo totalmente diferente. «Los seres humanos», escribió, «no son únicamente bocas que alimentar, sino también mentes productivas e inventivas que ayudan a encontrar soluciones creativas a los problemas del hombre, dejándonos en el largo plazo mejor que antes».

En medio de la confusión económica y ecológica de finales de los sesenta y las filas para conseguir gasolina, los embargos petroleros árabes, las masas de personas hambrientas en África y Asia, los accidentes nucleares y la creciente inflación mundial de los setenta, Julian Simon fue una voz solitaria y mesurada que nos aseguró que la vida en el planeta estaba mejorando, y no poniéndose peor. Cuando los expertos dijeron que se nos estaba acabando el petróleo y que los precios llegarían a los $100 por barril para el final del siglo XX, él nos aseguró calmadamente: no, los precios del petróleo caerán. (Hoy, tomando en cuenta la inflación, el crudo cuesta un tercio de lo que costaba en los setenta). Cuando la sabiduría popular dijo que estábamos perdiendo la capacidad de alimentarnos a sí mismos, Simon predijo correctamente que los suministros de comida, impulsados por la Revolución Verde en la agricultura, iban a superar el ritmo del creciente número de bocas humanas por alimentar. Cuando los amigos de cerrar las fronteras dijeron que los inmigrantes estaban robando trabajos estadounidenses y abusando del sistema de bienestar, Simon respondió con papeles que mostraban que los inmigrantes eran un factor clave en mantener a Estados Unidos como un gran país.

Los ambientalistas apocalípticos furiosamente denunciaron a Simon como un maniático. Paul Ehrlich, el biólogo de Stanford—cuyo libro The Population Bomb (La Bomba Poblacional) bien podría establecer el récord de todos los tiempos de profecías equivocadas—una vez bromeó diciendo que Simon probó que «lo único que no se está acabando en La Tierra son los idiotas». Al momento de la muerte de Simon debido a un ataque al corazón a los 65 años de edad, los académicos y conocedores solo podían observar el estado de los asuntos humanos y conceder rencorosamente que fue el «cazador de pesimistas»—como lo apodara la revista Wired—el que estuvo todo el tiempo en lo correcto, y los apocalípticos como Ehrlich quienes eran los estafadores. «Cada tendencia de bienestar humano—expectativa de vida, mortalidad infantil, ingreso per cápita en la India, el número de carros por persona en China, la disponibilidad y calidad de agua y vivienda, el monto de tiempo ocioso que disfrutamos—está mejorando, no empeorando», escribió poco antes de su muerte en una versión actualizada de su libro más famoso, The Ultimate Resource (El Recurso Fundamental).

En persona Julian Simon lo podía derribar a uno con su entusiasmo contagiante. En reuniones profesionales y cenas formales, era famoso por sus corbatas fluorescentes. «Existe suficiente aburrimiento en el mundo», era su explicación. El resto del planeta estaba viviendo en blanco y negro; Julian Simon vivía en Technicolor.

Cuando lo conocí por primera vez en mis años en la Universidad de Illinois en 1980, las ideas de Simon eran tan sorprendentes que rayaban en la locura. Yo entonces sabía lo que todo el mundo sabía: que el mundo se estaba dirigiendo a una catástrofe ecológica, probablemente de proporciones bíblicas. Invierno nuclear, agotamiento del ozono, aire envenenado, lluvia ácida, extinción de especies, la muerte de los bosques y océanos, calentamiento globa—lla única pregunta es cuál iba a matarnos primero. Los apocalípticos del Club de Roma recién habían publicado su primer quejido, Los Límites al Crecimiento, el cual reporta que a La Tierra se le estaba acabando prácticamente todo lo necesario para mantener una vida sostenible. Paul Ehrlich había aparecido en el Tonight Show de Johnny Carson una docena de veces llenándole la cabeza a los estadounidenses con predicciones de inminentes hambrunas mundiales y pronósticos tenebrosos (por ejemplo: «Si fuera un jugador, apostaría a que Inglaterra no existirá en el año 2000»). Mientras tanto, la evaluación sobre el futuro de La Tierra de la administración Carter, Global 2000, ganaba titulares con sus predicciones de que «para el año 2000 el mundo estará más aglomerado, más contaminado, y menos estable ecológicamente». El maltusianismo era ahora la posición oficial del gobierno de Estados Unidos.

En medio de esto vino un eufórico, infatigable y calvo profesor de economía del Medio Oeste diciéndonos que todo estaba equivocado—que de hecho La Tierra no era plana. Era Julian Simon contra una red bien financiada y altamente respetada de cientos de apocalípticos profesionales, todos insistiendo en lo obvio—que todos nos estábamos yendo al infierno. Como resultó, ellos fueron derrotados.

Lo que otro montón de gente curiosa y de mentalidad abierta descubrió, escuchando a Simon y leyendo sus prodigiosos trabajos, era que los hechos que él ordenaba eran abrumadores. En Jerry McGuire, la expresión de Tom Cruise era «¡Muéstrame el dinero!» Julian tenía una variante profesional: «¡Muéstrame los datos!»

Su especialidad era examinar las tendencias no sobre cinco o diez o veinte años, sino sobre períodos muy largos—hasta que la información utilizable estuviera a disposición. Su metodología era simple: el mejor—de hecho el único—pronosticador del futuro es el pasado. Uno de sus eslóganes favoritos lo sacó de Winston Churchill: «Entre más atrás se mire, más adelante se puede ver». Lo cual explica cómo Julian Simon discernió tendencias que el resto de nosotros no pudimos ver.

La «crisis» energética de mediados de los setenta fue un clásico ejemplo de análisis de corto plazo. Los pesimistas miraron al período de 1972-1980—cuando los precios del petróleo explotaron de $3 a $30 por barril—y anunciaron que los precios aumentarían para siempre. Simon dijo: Pamplinas. Él miró a los precios de la energía sobre un período de 200 años—y como era de esperarse, con saltos ocasionales, éstos habían disminuido constantemente durante ese período. (Solo imagínese lo que pudo haber costado iluminar la casa de uno con aceite de ballena). Los setenta fueron una aberración histórica, ocasionada por las guerras en el Medio Oriente. Y por supuesto, una vez que la crisis política acabó, los precios del petróleo retomaron su histórica tendencia a la baja.

Simon se deleitaba indicando contradicciones inherentes entre la teoría apocalíptica y la evidencia del mundo real. «¿Existe un monto finito de petróleo?» preguntaba. Las audiencias asentían al unísono con sus cabezas. Bueno entonces, respondía, si los suministros de petróleo son finitos y los estamos usando a un ritmo acelerado, ¿por qué continúa cayendo el precio del crudo? La economía 101 dice que la escasez causa que los precios aumenten, ¡y ahí estábamos viendo a las gráficas de Julian que mostraban que el precio de la energía ha caído durante 200 años! Silencio atónito.

La respuesta, como la explicaba pacientemente Simon, es que la gente está siempre inventando nuevas fuentes de energía barata, desarrollando sustitutos (¿alguien usa todavía aceite de ballena?), y descubriendo nuevas reservas—el fondo del Mar del Norte, el esquisto de Wyoming, y quién sabe qué sigue. De hecho, hoy en día las reservas probadas de petróleo—ni qué decir de aquellas fuentes de energía que no podemos imaginar—son mucho mayores de lo que eran en los ochenta (lo cual incidentalmente dice mucho del por qué los precios del petróleo han permanecido bajos).

Aunque publicó una docena de libros y más de 200 artículos académicos, Simon es mejor recordado por su extraordinaria lucha intelectual con Paul Ehrlich, el siempre equivocado biólogo de Stanford. El venerado padrino de los neo-maltusianos en el Estados Unidos del siglo XX, Ehrlich una vez se quejó de que intentar explicarle límites biológicos a Simon «sería como tratar de explicarle distribución de gas a un arándano». Quizás debió haber intentado. En 1980, Simon le ofreció a Ehrlich una apuesta de $1.000: que cinco mercancías—de escogencia de Ehrlich—serían más escasas y por lo tanto más caras en un período de diez años. Ehrlich tontamente aceptó, especificando al cromo, cobre, níquel, estaño y tungsteno. No hay que hacer mucho esfuerzo para saber quién ganó. (El precio de las cinco mercancías disminuyó un promedio del 40%). La historia fue publicada en la primera plana de la New York Times Magazine, y por primera vez en su vida Simon fue tomado en serio. Otra apuesta de $100.000 de que cualquier medida significativa de la vida en el planeta mejoraría y no empeoraría sobre un período de 10 años—hecha en su libro The State of Humanity (El Estado de la Humanidad) de 1996—nunca obtuvo alguien que la aceptara.

La contribución más importante de Simon puede ser la de desinflar el coco de la «sobrepoblación». Frecuentemente se le preguntaba: De seguro que tenemos que estar preocupados por que la población del mundo se triplicara durante el siglo XX, de 2.000 millones a 6.000 millones. ¿No sugiere esto que el hombre está copulando descontroladamente, como las famosas ratas noruegas de John B. Calhoun que se multiplicaban en su encierro hasta que morían por falta de alimento? No, contestaba Simon, porque la humanidad no se propaga como ratas de campo. Somos la única especie facultada con la razón. Y con sus datos escrupulosos Simon continuaba al mostrar que conforme la gente se hace más rica tienen menos niños. Hace 20 años, los pesimistas pronosticaban un planeta Tierra agolpado. Hoy, todos los demógrafos serios predicen que la población global se estabilizará al final de este siglo. En Europa Occidental ya está sucediendo; la población nativa de Japón ha estado disminuyendo desde 1998.

Cuando conocí por primera vez a Julian Simon le pregunté sobre un reporte de las Naciones Unidas que pronosticaba una Tierra de 10.000 millones de personas. «Sí, es fantástico, ¿no?» «¿Qué?» le respondí. «Es una excelente noticia que el mundo pueda sostener a 10.000 millones de personas, quienes serán más sanas y prósperas de lo que somos hoy en día», me señaló. En otra ocasión poco antes de su muerte, le mostré un reporte sobre la creciente obesidad en el Tercer Mundo. «Increíble», exclamó, «durante 100.000 años los seres humanos han dedicado casi todo su tiempo a consumir suficientes calorías. Ahora la humanidad está tratando de consumir menos».

Esa era Julian—la sabiduría convencional nunca tuvo un peor enemigo. Él disfrutaba doblar las mentes de los estudiantes preguntándoles, «¿Por qué es que cada vez que nace un ternero el PIB per cápita de la nación aumenta, y cada vez que nace un bebé el PIB per cápita cae?» Buena pregunta—o quizás necesitemos una medida más sofisticada.

Una de las armas secretas de Simon era su antecedente profesional como estadígrafo. Él examinó años de promedios de bateo en béisbol y llegó a la sorprendente conclusión de que no existen las rachas de bateo. Si un bateador con un promedio de .300 tuvo cuatro hits al bate, su posibilidad estadística de tener un hit en su próxima oportunidad al bate sigue siendo de 3 en 10. Nunca estuve totalmente convencido, pero como siempre él tenía los datos. Yo todo lo que tenía era la superstición.

Pero en ningún otro tema era Julian Simon un destructor de mitos tan prominente como en el de la inmigración. Durante décadas las encuestas han mostrado que la mayoría de nosotros creemos que los inmigrantes le quitan el trabajo a los estadounidenses, disminuyen los salarios, abusan de los servicios públicos, y lastiman nuestra economía. En su galardonado libro de 1990, The Economic Consequences of Immigration (Las Consecuencias Económicas de la Inmigración), Simon demostró que cada una de estas creencias es totalmente contradicha por los hechos. «Los inmigrantes no solo no quitan puestos de trabajo, sino que los crean a través de sus compras y a través de su propensión a empezar nuevos negocios». Spencer Abraham, actual secretario de Energía de Estados Unidos, entonces presidente del Comité sobre Inmigración del Senado, le da crédito al trabajo de Simon por ayudar «a mantener abiertas las puertas de Estados Unidos a los inmigrantes».

Otras dos personalidades prominentes convertidas por Simon fueron Ronald Reagan y el Papa Juan Pablo II. En 1984, con las protestas del lobby que favorecía el control de la población mundial, la administración Reagan adoptó la línea de Simon: que la gente es creadora de recursos, no destructora de éstos, y que «el capitalismo es el mejor anticonceptivo». Gracias en parte a Julian Simon, Estados Unidos dejó de financiar programas coercitivos de control poblacional alrededor del mundo, entre ellos la política genocida de China de un hijo por pareja. Luego fue invitado al Vaticano a explicar sus teorías. «No son muchos los muchachos judíos de Nueva Jersey que son invitados a tener una audiencia con el Papa», me dijo con regocijo. Una encíclica posterior del Papa Juan Pablo II tuvo claramente su influencia, ya que urgía a los gobiernos a tratar a la gente «como activos productivos».

Hoy es más duro—aunque difícilmente imposible con grupos como Greenpeace, Planned Parenthood y otras organizaciones ambientalistas—el mirar racionalmente a la evidencia y creer que se nos está acabando la comida o la energía. Pero aquellos que no conocieron a Julian o a sus escritos en los setenta y comienzos de los ochenta no pueden apreciar en su totalidad la manera salvaje en que fue atacado, tanto por la izquierda como por la derecha.

De hecho la batalla ha continuado sobre su tumba. A finales de los noventa, Bjorn Lomborg, un joven profesor de estadística danés y activista de Greenpeace, leyó el perfil de «Cazador de Pesimistas» de Simon publicado en la revista Wired mientras esperaba por un avión en el aeropuerto de Los Ángeles. Indignado por lo que leyó, Lomborg se embarcó a refutar las extrañas teorías de Simon. A cambio, para su asombro, la información más bien se quedaba corta en mostrar el verdadero caso a favor de un mundo optimista. El inteligente y popular libro de Lomborg, The Skeptical Environmentalist (El Ambientalista Escéptico), todo un compendio de datos, se ganó la cólera instantánea del movimiento Verde mundial por desafiar el culto del Apocalipsis. Pero los ataques que ha recibido de la vieja guardia decadente no son nada comparados con lo que Simon absorbió hace dos décadas. Lomborg tuvo el lujo de pararse sobre los hombros de un gigante—una deuda de gratitud que todos tenemos hacia Julian Simon.

Los ataques contra Simon eran prueba del poder de sus ideas. Por más que han intentado, sus críticos nunca han podido desacreditar sus datos, mucho menos sus teorías. Estando ya en el siglo XXI, casi todos los indicadores de bienestar humano—desde mortalidad infantil hasta acceso a Internet—continúan su ascenso.

A Julian no le parecía que lo describieran como un optimista. «Yo no soy un optimista; soy un realista», insistía.

Cuando Paul Ehrlich ganó un premio MacArthur de «genio», John Tierney del New York Times le preguntó a Julian si él creia que algún día podría ganar un premio. Simon respondió: «Lo único que voy a ganar es un McDonald’s». Ese es el destino de los verdaderos profetas.

Julian Simon creía que el progreso humano dependía en las mentes creativas e ingeniosas, pero también en las instituciones libres, «Las grandes poblaciones son solo un problema cuando están atadas a gobiernos tiránicos», escribía. De hecho, muchos de sus críticos más ardientes eran activistas gubernamentales quienes insistían que la única solución concebible para el inminente Apocalipsis ecológico era edictos gubernamentales cada vez más severos: políticas coercitivas para la estabilización de la población, racionamiento del gas, controles a los salarios y a los precios, reciclamiento obligatorio, etc. Hubo pocos estadounidenses que ganaron tantas batallas por la libertad como Julian Simon.

Poco antes de su muerte, Simon dijo que se sentía muy cómodo sobre dos predicciones. Primero, que cada medida significativa de bienestar humano continuaría mejorando. Y segundo, que la gente continuaría quejándose sobre cómo las cosas eran mejores en el pasado.

Lo que no dijo es quizás su contribución más perdurable: la idea de que los seres humanos no solo usan recursos mientras habitan este planeta; también los crean. Es por eso que más gente es algo bueno—significa una mayor posibilidad de más Einsteins, Mozarts y Edisons. Y, solo podemos esperar, más Julian Simons.

Traducido por Juan Carlos Hidalgo para Cato Institute.

CAAMAÑO MINISTRO Y MASÓN…

Caamaño masón

Cuando nombraron ministro de justicia al Sr. Caamaño algunos medios señalaron su condición de masón. En un principio nada de especial debería tener la vida privada de cualquier español que llega a un cargo de responsabilidad en la administración. Debería dar lo mismo que perteneciera a los Boys Scouts, la Asociación de Amigos del Burro o a la Cofradía de la Virgen del Amor Hermoso… el problema viene cuando constatamos que todas y cada una de las medidas que va proponiendo y adoptando se adhieren totalmente al corpus programático de la masonería. Así, en un ministerio con unos problemas tan acuciantes como  la absoluta sobrecarga de trabajo en los juzgados, el Sr. Caamaño se dedica a temas como abrogar a favor del aborto (ninguneando el derecho a la objeción de conciencia de los médicos) y la retirada de los símbolos religiosos de la escuela pública.

La realidad da cada vez más la razón a los denominados “conspiranoicos” va a resultar que no son tan paranoicos como creíamos.

Si quieres leer algo sobre la masonería, en este blog publiqué una entrevista a un ex masón la mar de interesante.

Entrevista a DANIEL ESTULIN.

Daniel Estulin

Para los no iniciados Daniel Estulin es un investigador-escritor que se ha propuesto desvelar las decisiones ocultas que  los superpoderosos secretos decretan para gobernar el mundo. Sobre todo se dedica a investigar al Club Bildelberg, ha escrito varios libros sobre el tema y esta es su última entrevista. Aunque solo sea verdad un 10% de lo que cuenta, es para abrocharse bien los cinturones que vienen curvas. Un saludo.

Desde Rusia hasta su retiro en algún lugar de Cádiz. En sus libros (2,5 millones vendidos), el planeta es un cortijo para poderosos que están por encima del orden mundial conocido.    

10 Agosto 09 – Paco REYERO – LA RAZÓN

 

«Ahora mismo me estoy tocandou los huevos de verdá, tío, porque en unass semanass saldrá mi próximo ‘librou’, una mezcla de ficción y ‘realidá’, al estilo de John Le Carré. La editorial me advirtió de la magnitud del mater(r)ial y me llevó hasta la novela;  ahí se dicen cosas muy fue(r)tes, como en el resto de mis libros: datos reales que no es bueno que pasen por ensayo por las rep(r)esalias a las que nos exponemos.  He sido perseguido y «estos tíos» me han querido matar pero está por encima de mí como individuo, denunciar que hay grupos de poder absoluto que actúan en la sombra, manejando el planeta. Podría haberme estado quieto pero, al final, piensas que entre hacer tu deber y estar rico hay poca diferencia. En vez de un utilitario puedes tener una escudería; una mansión en vez  de  una casa y un ‘ha-rem’ en vez de una sola mujer. En todo eso no hay nada realmente importante. Sé que es difícil de creer que Zapatero, Obama y su puta madre no pintan nada y que hay una complot de los verdaderos amos del mundo para disminuir la población mundial, pero es que realmente es así. Somos seis mil millones de personas y el próximo escalón se situará en torno a los diez mil millones. Con la energía atómica se podría sostener esta población mundial, pero ellos no lo quieren permitir. ¿Quién morirá? Obviamente tú y yo moriremos; Rockefeller, no. Ellos quieren que haya entre dos y tres mil millones de personas. No más. Este objetivo estaba contemplado ya  en papeles desclasificados de Estados Unidos, durante el gobierno de Nixon.  Y la crisis mundial que se aproxima para los siguientes cuatro o cinco meses va a ser devastadora. Lo veremos a partir de octubre. Todo está quebrado, los grandes bancos financieros de Estados Unidos,  que aún no han sido enter(r)adosss, son auténticoss mue(r)tos vivientes a la espera de la tumba. No me gusta dar consejos, pero el dinero de papel no valdrá nada, menos que un rollo de papel del váter, tío, y sé lo que digo. El único valor refugio, como siempre lo ha sido, es comprar lingotes de oro puro. A lo largo de la Historia, vemos que siempre ha sido así. Los poderosos tienen poca liquidez, la justa. Son ricos en oro.  Y la gripe que nos amenaza también está pensada en este sentido. Hace tiempo que se encontraron documentos de Zurich en los que ya se advertía de la propagación de este virus, estábamos en el año 96. De eso hace ya casi trece años. Te toman por loco y luego todo encaja. Me empecé a interesar por estos temas al coincidir casualmente con un compañero de mi abuelo, que era coronel de l KGB. Este hombre me advirtió que en el año 95, Quebec que(r)ría independizarse de Canadá. Pensé que estaba flipado, un loco más. A los tres años sucedió, tal y como él lo predijo. Luego vino El Club Bilderberg, al que llevo estudiando más de quince años. Hice el trayecto hasta Canadá, donde se celebraba una de las reuniones, y me detuvieron cincuenta veces por lo menos. ¿Cómo no vamos a pensar que estamos totalmente controlados? Trato de aclarar que hay reinas que se dedican al tráfico de heroína, que el precio del petróleo está pactado entre los poderosos, que las películas de Hollywood se utilizan muchas veces como sucedáneos de la realidad: cuando la gente las ve, dice, esto  no puede ser verdad y, sin embargo, la realidad es mucho más delirante. Digo verdades como puños, como catedrales, que parecen películas americanas. Mi representante, Germán Torrado, ha firmado con HALCYON, una productora independiente que este año ha facturado Terminator Salvation, los derechos de mis libros para llevarlos al cine. A mí no me preocupa especialmente el dinero y hasta ahora todo lo que he dicho y escrito nadie me lo ha podido desmentir. No estoy en esto para hacerme rico. Nací en Rusia, vivo en algún lugar de Cádiz, a donde llegué después de que un traficante colombiano de diamantes me pusiese una «cinta-caset» del «Entre dos aguas» de Paco de Lucía. Escuché el flamenco y me prendí. Primero estuve en Morón de la Frontera y luego aquí, con mis hijos, mi mujer, mi vida silvestre…»

LOS ENFERMOS SE NIEGAN A VIVIR, NO POR LA ENFERMEDAD SINO PORQUE ESTÁN SOLOS…

Hermanas de la Caridad en Calcuta

Las hermanas de la Caridad rezan antes de salir a las calles de Calcuta.

Leí este artículo el domingo y me quedé con esta reflexión… LOS ENFERMOS SE NIEGAN A VIVIR, NO POR LA ENFERMEDAD SINO PORQUE ESTÁN SOLOS… y me acordé del debate sobre la eutanasia. Hagamos caso a estas monjas que tienen más experiencia que nadie con los moribundos. (Abajo os copio el artículo completo)

La Razón. Calcuta 2 Agosto 09 – Belén Manrique – Enviada especial

A PESAR DEL SUFRIMIENTO QUE LES RODEA LAS HERMANAS ESTÁN SIEMPRE ALEGRES.

CALCUTA-Son las seis y media de la tarde en Calcuta. Acaba de empezar la hora santa en la casa madre de las Misioneras de la Caridad. Alrededor de 20 monjas ataviadas con el sari blanco decorado con la banda azul que las caracteriza y distingue como hermanas de la Caridad rezan el Rosario arrodilladas ante el Santísimo, mientras el doble de voluntarios, unos 40, las acompañamos con nuestras oraciones o escribimos en un cuaderno las experiencias diarias. El silencio interior de la capilla se rompe con el ensordecedor ruido de los vehículos de la calle que penetra por las ventanas abiertas. Sin embargo, resulta sorprendente que no logre perturbar el momento de oración de las monjas, que aguantan arrodilladas durante toda la hora, algunas a pesar de su vejez, con entereza, pasión y entrega. Una planta más abajo, el cuerpo de la Madre Teresa descansa en una tumba decorada con flores y velas alrededor de la cual se puede ver constantemente a indios rezando.
Esta escena se repite cada día y a la misma hora en la casa de la congregación que inició la Madre Teresa de Calcuta en 1946, cuando, mientras viajaba en tren por la India, tuvo un encuentro místico con Cristo, quien le decía: «I Thirst», «Tengo Sed», frase que se puede leer al lado de un crucifijo en las fachadas y paredes de las numerosas casas de la orden. Y es que es ésta precisamente la finalidad de la congregación: saciar la sed de amor y de sacrificio que tuvo Jesús en la cruz a través de la caridad hacia los más desfavorecidos.

 
Una tarea nada fácil, ya que significa renunciar a todas las comodidades,  incluso a la propia vida, por pasar los 365 días del año al servicio de niños desnutridos, discapacitados o enfermos terminales olvidados por la sociedad  y a los que las monjas recogen para dar una vida o una muerte digna. Sin embargo, ellas siempre están felices, y eso es, quizá, una de las cosas que más nos impresiona y conmueve a los cientos de voluntarios que por estas fechas llenamos las casas de la orden para colaborar con nuestro pequeño granito de arena, cambiando las horas de playa tumbados al sol por momentos de charlas y juegos con niños y adultos necesitados de atención y cariño. «Todo aquí merece la pena»
Las seis de la mañana ya no es la hora de llegar a casa después de una noche de fiesta veraniega, sino el momento de entrar en la capilla para oír misa con las monjas, que nos dará las fuerzas necesarias para afrontar la dura jornada. Y es que moverse por las calles de Calcuta resulta agotador por su caótico tráfico, la suciedad, el calor húmedo y pegajoso, los fuertes y desagradables olores… Pero merece la pena por hacer compañía a un enfermo que se niega a comer y seguir viviendo, no por la enfermedad que padece, sino porque está solo en el mundo; o arrancarle la sonrisa a un niño con parálisis cerebral. La Madre Teresa combatía el aborto con la adopción ya que valoraba la vida como un precioso regalo de Dios. Así, mientras en Occidente se considera que un niño con síndrome de down no merece vivir, en Calcuta monjas y voluntarios dan un hogar, educación y cariño a cientos de ellos.

LA PÍLDORA DEL DÍA DESPUÉS. Por Juana Lorenzo Vian.

pildora dia despues

 

La pildora del día después

 

Qué bueno sería que existiera una píldora del día después para todos y para todas las situaciones cotidianas que tenemos que vivir y que no nos gustan.

Sería maravilloso que, ante nuestros fracasos, enfermedades, desilusiones, obligaciones, errores, actos equivocados, etc., pudiéramos evitar sus consecuencias con solo ingerir una píldora, además sin que nadie nos la negara, no tuviéramos que dar explicaciones, no nos censuraran ni criticaran, solamente abrir el monedero y comprarla, coger un vaso de agua y hasta el final, ¡YA NO HAY PROBLEMAS!. Verdaderamente sería estupendo, si fuéramos muñecos. Pero no lo somos, somos personas y como tal tenemos que actuar con responsabilidad en todas las facetas y circunstancias de la vida.

El tema que nos ocupa se podría escribir desde muchas perspectivas pero me voy a centrar en la que más  importa: en la mujer, en el hombre, en definitiva en la persona.

Parece mentira que el Anteproyecto de Ley de Salud Sexual y Reproductiva haya salido del Ministerio de  Igualdad, creo que no se ha redactado en toda la democracia vivida, una ley mas machista  ya que incide única y exclusivamente en la mujer, y encima en una mujer que está empezando a vivir su cambio psicobiológico, ha dejado de ser niña hace uno o dos años y aún huele a “nenuco”. Se que suena  ñoño pero es real.

Otra vez insisto: parece mentira cómo se sigue manipulando a la mujer y desde pequeñita (por si la niña se nos espabila antes de tiempo).

Las relaciones sexuales es cosa de dos. Pero parece ser que a la ministra eso no le importa, hay que seguir machacando a la mujer, es la que “genéticamente está más condicionada”, “viene al mundo más predispuesta a llevar los malos tragos de la vida”,  y así van le va a la mujer.

En caso de riesgo: que la chica  se tome la píldora ¡ÓLE LA IGUALDAD!

Si esto es cosa de dos serán los dos los que tengan que tomar  medidas. Para ello, hace unos años, nos gastamos todos los españoles una millonada en la publicidad de “póntelo pónselo” Ahora dicen que no ha dado resultados, o sea, que los chicos no están por la labor y alegan  que el preservativo no funciona porque “es muy difícil “parar” cuando  da el “calentón” (palabras textuales recogidas de distintos medios de comunicación el martes  13 de Mayo de 2009).

La ministra seguramente no sabe que a las personas se las educa desde la cuna, que las rabietas de los bebes, además de calmarlas, hay que educarlas en la niñez para que se vayan  extinguiendo en la juventud,  hasta llegar a eliminarlas año tras año, y esta labor es responsabilidad de los padres y educadores y así, hasta  que esos impulsos no estén bien controlados, no se les puede fomentar ni facilitar el uso de actos que exigen una madurez personal como es la relación sexual. Y mucho menos interferir en la educación de los padres privándoles de su responsabilidad y fomentando en los chicos el individualismo y ocultismo más absoluto  porque ello lleva a  la carencia de afectos familiares.

Ese “calentón, como otros calentones,” sin haber aprendido a controlarlos a los 14 o 15 años, es lo que luego se convierte en un “bofetón” a los veinte, treinta, cuarenta años o más, y para el bofetón no hay píldora del día después y en muchos casos, para la mujer, tampoco hay día después.! POR TANTO, MUCHÍSIMO CUIDADO!

Un ministerio no se puede meter en todo, tiene sus límites, no se puede legislar a acierto/error sobre personas en formación, chicos y chicas que tienen que aprender a vivir y vivir es esfuerzo, es alegría de lo bien hecho, es respeto, comprensión, amor, ilusión, sacrificio, no se puede permitir que un “calentón adolescente” suponga, para el chico irse el día siguiente  de fiesta, y para la chica faltar a las clases o al trabajo porque está vomitando, tiene una hemorragia no controlada o ha presentado una reacción alérgica al fármaco ¿ESTO ES UNA LEY QUE  PROPUGNA LA IGUALDAD?

Tampoco una ministra puede decir tonterías como la expresada ayer: Cuando se apruebe la ley en cuestión estaremos más cerca de Europa.

 Nosotros somos europeos y dentro de Europa somos españoles por lo tanto nada nos puede acercar más. Sólo nos pude hacer mejores ciudadanos españoles y por lo tanto europeos, el idioma, la educación y la formación. La función de los  ministerios es hacer  leyes que obliguen a los estudiantes a superar satisfactoriamente sus enseñanzas regladas en español y en inglés y tener desarrolladas sus capacidades personales, al cumplir los 16 años.

   La vida se labra día a día  y  cada edad tiene unas exigencias y si las etapas no se respetan y se incide en ellas, se desarrollará una sociedad blanda, necesitada de muchas píldoras ¿habrá píldoras para todos y para cada una de las circunstancias adversas que encontremos en la vida?

Para todo no existe píldora del día después. Legislen en responsabilidad, y en valores y que ni una sola ley sirva para liberar al hombre y machacar a la mujer, NI UNA SOLA.

 

PIDO A LA MINISTRA DE IGUALDAD LEYES IGUALITARIAS PARA HOMBRES Y MUJERES (si todavía no ha encontrado la fórmula, que se quede quieta pero que no fomente más la desigualdad que existe).

 

Juana Lorenzo Vian

SOBRE NUESTRO SISTEMA EDUCATIVO.

Algunas veces al profundizar en el conocimiento de nuestro sistema educativo y su situación real hoy por hoy, tengo la tentación de acordarme de ciertas teorías conspiranoicas (que en su momento compartiré con vosotros a través de este blog). Estas teorías aducen que el deterioro del sistema y el bajo nivel cultural de los ciudadanos que genera el proceso educativo actual no es casual sino buscado adrede por ciertos poderes para conseguir turbios objetivos de dominación.

Soy de las personas que se leen hasta los prospectos del Cola Cao y de todo aquello que cae en mis manos, ha sido de este modo que he llegado a conocer un texto, que aparecía como editorial en una revista de los notarios. Creo que merece la pena ser leído, a no ser que también vosotros seáis hijos de la malhadada E.S.O. actual y no seáis capaces de aguantar la lectura de esta pequeña extensión…

REBELION EN LAS AULAS

“El proceso de adaptación de los estudios universitarios al llamado Plan Bolonia ha generado una notable polémica en los últimos meses, aunque seguramente no todo lo reflexiva y razonada que hubiera sido deseable. Y es que no es posible escapar a la convicción de que el verdadero problema no descansa tanto en Bolonia, como en el lamentable estado de la educación en España; tanto la universitaria, como la primaria y la secundaria. Y sería bueno que nuestros responsables políticos tuvieran verdadera conciencia de ello, porque no hay asunto de mayor trascendencia en una sociedad que la manera en que ésta se ocupa de la educación de sus jóvenes.

No es sólo un problema económico, con ser crucial. Los efectos devastadores que la crisis económica mundial está generando en nuestro país han puesto de manifiesto la debilidad del modelo de crecimiento, basado en la producción de bienes y servicios de escaso valor añadido. Es obvio que cualquier alternativa pasa por la formación del capital humano necesario para liderar y sostener el cambio.

Una educación pública devaluada…

Pero tan importante como el económico es el aspecto social y político de la cuestión. La educación pública de calidad es el principal “ascensor social” de un país. Por ello, una educación pública devaluada, cuyas titulaciones carecen del menor prestigio en el mercado y que por ello deben ser completadas con costosos máster en centros privados o universidades extranjeras, atenta a la base misma del orden constitucional, que nos define como un Estado social y democrático de Derecho. Lo verdaderamente paradójico es que una deficiente gestión política ha terminado por garantizar una aparente igualdad formal (cada español con su título) que amenaza consagrar una funesta desigualdad económica (pero sólo los ricos lo complementan adecuadamente).

Esta es sin duda la clave del asunto. La legislación estatal de los últimos años y sus descoordinados desarrollos autonómicos no parecían tener otro objetivo que rebajar el nivel de exigencia en primaria y secundaria como principal instrumento para reducir nuestro elevado nivel de fracaso escolar. No ha sido precisamente un éxito. Los últimos datos publicados informan que en España hay un 31% de abandono escolar temprano, lo que representa el triple de lo de lo previsto en los objetivos de Lisboa para el año 2010 y con tendencia a aumentar. Por otra parte, el último informe Pisa coloca a los alumnos españoles en el puesto 31 en Ciencias, 32 en Matemáticas y 35 en lectura, donde empeoramos por tercera oleada consecutiva.

La tendencia inflacionista alcanza, como no podía ser de otra manera, a toda la Universidad española, pero especialmente a los estudios de Derecho. Nuestro modelo educativo se ha fundado durante décadas en un ofrecimiento masivo por los poderes públicos de plazas universitarias a través de algunas facultades, como las de Derecho, destinadas a generar un número de licenciados muy superior al demandado por la sociedad. El desarrollo del Estado Autonómico y la atribución a las Comunidades Autónomas de competencias en enseñanza superior no parece sino haber agravado el problema. Las facultades de Derecho han surgido como hongos, asumido irreflexivamente por nuestras oligarquías regionales el objetivo –tan poco universitario, por cierto- de que no quede una ciudad mediana sin su facultad de Derecho. Hoy los estudios de Derecho pueden cursarse en nada menos que aproximadamente setenta centros de educación superior.

… en la que prima la cantidad sobre la calidad….

Frente a este empeño en la cantidad, la preocupación por la calidad parece haber sido absolutamente marginal. En numerosos casos el nivel de exigencia es muy pobre, lógica consecuencia también de una secundaria incapaz ni de formar ni de filtrar. Dedicar tiempo a la enseñanza se hace cada vez más duro e ingrato para el profesorado competente, que delega la tarea a la mínima oportunidad. Los caudales públicos se aplican a conseguir que las tasas sean muy bajas, en vez de dotar un amplio sistema de becas para quien realmente lo merece y necesita. Los alumnos perezosos pueden permitirse el lujo de repetir asignaturas año tras año, sin exigencias adicionales, todo a cargo del contribuyente. La tasa de fracaso universitario y el insuficiente rendimiento académico suponen un coste anual de aproximadamente el 0,75 % del PIB. Sin embargo, no parece haber siquiera conciencia entre los repetidores de estar malgastando recursos públicos, y recordarlo parece ser políticamente incorrecto.

Las universidades privadas tampoco han contribuido sustancialmente al objetivo de la calidad. Salvo en unos pocos honrosos casos se han configurado como meros negocios dispuestos a facilitar unos títulos cada vez más devaluados. Por otro lado, también se desaprovechan las expectativas de decrecimiento demográfico. Ante la escasez de alumnos, sigue siendo tabú la propuesta de cierre de centros, y en vez de ello parece haberse desatado una cierta competición por atraer al alumnado escaso a través de sugerencias de facilidad, más que de prestigio.

A todo ello hay que añadir la endémica endogamia en el profesorado universitario español, favorecida por un incorrecto sistema de financiación y por una interpretación muy particular del llamado principio de la autonomía universitaria, que en lo que acaba es en el menosprecio del mérito como factor principal para la promoción. El espíritu crítico propio de los estudios superiores se marchita así en una densa maleza de intereses particulares.

… que hace que el sistema educativo no exista.

Es en este caldo de cultivo en el que desembarca Bolonia. Cualquier partidario de la reforma que pretenda alabarla únicamente sobre el papel recuerda necesariamente a esos filósofos de los que se reía Spinoza, que creen hacer una obra divina y alcanzar la cumbre de la sabiduría cuando han aprendido a alabar una naturaleza humana que no existe, por lo que están condenados a no idear jamás una política que pueda llevarse a la práctica. En los países anglosajones el sistema funciona, con mayor y menor eficacia, porque todo el sistema educativo está orientado a que funcione. Tiene sin duda sus deficiencias, pero cumple sus objetivos. En aquellos países, como Alemania, en los que el sistema está orientado de manera diferente, y también funciona, el Plan Bolonia no va a ser aplicado. En la Universidad alemana los exámenes de Estado cumplen adecuadamente su finalidad y el cambio no se justifica.

En España, donde no es que el sistema educativo no funcione, sino que propiamente no existe, dado su fragmentación y su inoperancia, algunos consideran Bolonia una oportunidad para iniciar la reforma necesaria. Puede que en parte tengan razón, pero lo que no cabe ninguna duda es que, o se inicia un serio camino de reconstrucción íntegra sistema educativo en España o Bolonia servirá, en el mejor de los casos, para parchear algunas deficiencias y en el peor, nos tememos, para agravar aún más los males de la Universidad española”.